Resumen
- Dos oficiales de la policía de Minneapolis han sido asignados específicamente al área donde George Floyd fue asesinado en 2020.
- La Plaza George Floyd se convirtió en el epicentro de la lucha de la ciudad por manejar la tensión y frustración tras el asesinato de Floyd.
- FOX 9 acompañó recientemente a los oficiales mientras patrullaban su nueva zona e interactuaban con vecinos y dueños de negocios.
MINNEAPOLIS (FOX 9) — Cinco años después de que el asesinato de George Floyd revelara la profunda desconfianza hacia el Departamento de Policía de Minneapolis (MPD), dos oficiales patrullan una zona que muchos aún sienten olvidada.
Policías patrullando una exzona “prohibida”
Antecedentes:
- La intersección de la calle 38 y la avenida Chicago en Minneapolis será un punto de reunión esta semana, cuando la ciudad conmemore el quinto aniversario del asesinato de George Floyd.
- Sin embargo, durante los últimos años, no todos han sido bienvenidos en lo que se conoce como la Plaza George Floyd.
- En los meses posteriores al asesinato de Floyd, el área fue considerada una “zona prohibida” para los policías que respondían a informes de crímenes violentos, incluso cuando vecinos y dueños de negocios expresaban su frustración por las barricadas que bloqueaban las calles.
Aunque las barricadas físicas se retiraron hace años, el MPD aún intenta superar las barreras emocionales que persisten cinco años después.
Mientras la ciudad debate un plan de desarrollo a largo plazo para el área, dos oficiales buscan construir un cimiento diferente:
“Construir esa relación, generar confianza, porque al final, la comunidad merece tener policías, y eso es lo que queremos que vean”, dijo el oficial Xander Krohnfeldt.
Krohnfeldt y su compañera Drea Mays patrullan la zona cinco días a la semana.
La otra cara
FOX 9 acompañó a los oficiales mientras interactuaban con vecinos y dueños de negocios que aún están enojados por el asesinato de Floyd y la respuesta de la ciudad.
“¿Dónde estuvieron ustedes durante cuatro años?”, preguntó Edwin Reed, dueño de Sincere Detailing Pros en la avenida Chicago. “No he podido dormir porque temo por mi negocio”.
Mientras Reed expresaba su frustración a los oficiales a principios de mes, otra residente que pasaba por ahí compartió su preocupación:
“Vivo justo ahí y acabo de ser robada y casi asesinada”, dijo. “Tienen que hacer algo con esta zona”.
Panorama general
Krohnfeldt se unió al departamento de policía en 2021, después de trabajar como paramédico. En ese rol, vivió de cerca la dificultad para responder adecuadamente al área mientras aumentaba el crimen y disminuía el número de oficiales.
“Entiendo cuando las cosas se salen de control y no hay policías para responder”, dijo. “Hubo muchas veces en las que, estando en la ambulancia, pedía apoyo policial y me decían: ‘No, no hay oficiales disponibles’, incluso cuando era la ambulancia la que lo pedía”.
Aunque los oficiales buscan establecer una presencia constante en la Plaza George Floyd, también deben navegar la compleja relación del vecindario con el departamento.
Tras el asesinato de Floyd, investigaciones estatales y federales encontraron que la policía de Minneapolis mantuvo un patrón de discriminación durante años.
“Hay problemas sistémicos obvios… no solo en el departamento de policía, sino en la sociedad, en el gobierno de la ciudad”, dijo el jefe Brian O’Hara en una entrevista este año. “Y el departamento de policía es solo un reflejo de esos problemas sistémicos”.
Diálogo difícil pero necesario
Mientras Krohnfeldt caminaba por la avenida Chicago en abril, varias personas gritaron los nombres de otros hombres negros asesinados por la policía en Minnesota y EE.UU.
“Eso me hace querer tener una conversación”, dijo Krohnfeldt.
Él y su compañera parecen buscar esos diálogos difíciles. Entran a negocios y se detienen a hablar con vecinos en la calle.
“Ser más abiertos a cómo se siente la gente, lo que piensan, y realmente escuchar sus preocupaciones”, dijo Mays.
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