Atlanta, Georgia.- El encuentro fue una batalla táctica y emocional desde el primer minuto. Ambos equipos protagonizaron un primer tiempo intenso, con llegadas claras y atajadas espectaculares de Gianluigi Donnarumma y Manuel Neuer. La tensión creció aún más cuando Jamal Musiala, del Bayern Munich, sufrió una grave lesión de tobillo que conmocionó a todos en el estadio.
La segunda mitad fue un torbellino. A los 78 minutos, el joven Désiré Doué rompió el cero con un golazo tras una jugada colectiva que desató la euforia de los aficionados parisinos. Sin embargo, apenas tres minutos después, el PSG sufrió su primera baja: el defensor ecuatoriano Willian Pacho fue expulsado con roja directa por una dura entrada.
PSG se queda con nueve hombres
El Bayern, con superioridad numérica, se volcó al ataque, pero se topó con una muralla defensiva liderada por Marquinhos y un Donnarumma inspirado. Cuando parecía que el PSG resistiría con diez, Lucas Hernández cometió una imprudencia al soltar un codazo y también fue expulsado al minuto 90.
Con nueve hombres y el Bayern lanzado al frente, el PSG encontró el golpe final. En el minuto 96, Ousmane Dembélé aprovechó un contragolpe letal y definió con clase para sentenciar el 2-0 definitivo. El gol fue un estallido de emoción para los parisinos, que celebraron como si ya hubieran ganado el título.
El PSG, campeón de la Champions League, avanza a semifinales con una actuación heroica que quedará en la memoria de sus aficionados. Su próximo rival saldrá del duelo entre Borussia Dortmund y Real Madrid.
