Tras el viaje de Donald Trump por Asia, donde su principal reunión era con el líder chino, Xi Jinping, el estadounidense abandonó Corea del Sur y no le dio importancia al Foro de Cooperación Económica de Asia-Pacífico (APEC), lo que aprovecha el mandatario del gigante asiático, coinciden expertos.

La decisión de Trump de abandonar Corea del Sur “deja un vacío simbólico en un foro que representa más de la mitad del comercio mundial, vacío que China aprovecha para proyectarse como defensora del libre comercio y del multilateralismo”, indica el politólogo Pablo Salas a este medio.

El foco de atención durante la primera jornada de la cumbre de líderes, que concluye el sábado en la ciudad meridional de Gyeongju, giró en torno a las bilaterales mantenidas por Xi con la primera ministra de Japón, Sanae Takaichi, y el mandatario canadiense, Mark Carney.

Durante la apertura de la cumbre de APEC, Xi defendió la necesidad de crear un “entorno económico regional abierto y promover el comercio, la liberalización y la facilitación de las inversiones”.

China “no cerrará sus puertas al mundo exterior, sino que las abrirá aún más”, añadió Xi, según Xinhua, antes de avanzar una vaga propuesta de cinco puntos para promover “una globalización económica inclusiva y beneficiosa”.

“Cuanto más turbulentos sean los tiempos, más debemos trabajar juntos”, afirmó Xi durante la sesión inaugural de la APEC. “El mundo está atravesando un periodo de cambios rápidos y la situación internacional se vuelve cada vez más compleja y volátil”, agregó.

Octavio Pescador, analista y académico investigador de la UCLA, coincidió en que el gigante asiático ha ganado terreno: “China, viendo los espacios que ha abierto Estados Unidos con el cierre de USAID está tomando la oportunidad y ha apalancado, con los recursos que tiene, en términos de productividad industrial y demás, pero sobre todo, el control de los minerales raros y el poder del bolsillo, el poder de decir: no me tratas bien, entonces no te compro soja y a ver cómo nos va”.

Salas también añadió que “la decisión de Trump de abandonar Corea del Sur tras su encuentro con Xi y no permanecer en la cumbre de APEC refuerza su estilo de privilegiar acuerdos bilaterales que pueda presentar como victorias inmediatas, en lugar de comprometerse con espacios multilaterales que requieren negociaciones prolongadas y compromisos compartidos”.

Pescador agregó a este medio que tras la tensión entre EU y China, “se da una tregua de un año en esta guerra comercial”.

Trump fue el gran ausente en el arranque de la cumbre. Tras reunirse el jueves con Xi en la vecina ciudad costera de Busan, emprendió el camino de vuelta a Washington ese mismo día y sin esperar al arranque de la cumbre de APEC.

“El gesto de Trump no sólo mostró desinterés hacia la APEC, sino que también acentuó la percepción de un país replegado en sí mismo, dejando espacio a otros actores para ocupar el centro del escenario”, remarcó el politólogo Salas.

La tarea de presentar el punto de vista de Washington recayó sobre el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, quien defendió el “reajuste comercial” de su país en medio de la ofensiva tarifaria de Washington.

“Bajo el liderazgo del presidente Trump, Estados Unidos está reequilibrando sus relaciones comerciales para construir una base más sólida para el crecimiento mundial”, dijo Bessent en la reunión de apertura de la cumbre en la ciudad de Corea del Sur.

Pescador recordó que a Trump “no le interesa quedar bien con absolutamente nadie. Sólo le importa el interés de Estados Unidos (…) él ve en su persona la encarnación del país, y el trato que logra él, la victoria que tiene económica de negociación, él la asume para el país”.
Canadá y el gobierno mexicano buscan “consolidar presencia”

Mientras, Canadá y México “buscan consolidar su presencia en Asia-Pacífico como complemento a su dependencia del mercado estadounidense”, añadió Salas a El Gran Diario de México.

“Canadá y México y el resto de los países están siguiendo las reglas tradicionales del libre comercio y del posicionamiento de sus productos, y del entramado de comercio internacional como se había dado. Es Estados Unidos, y es Trump en lo personal, quien está cambiando el esquema, quizá a EU le sirve, pero el resto no lo está haciendo así”, agregó Pescador.

“Sin embargo, la falta de respaldo visible de Washington en este foro debilita la proyección del bloque norteamericano como un actor cohesionado. En paralelo, China y otros países de la región capitalizan la ausencia estadounidense para tejer nuevas alianzas, lo que podría reducir la influencia de Norteamérica en el diseño económico de la región del Pacífico”, declaró Salas.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here