El plan del presidente Donald Trump de enviar tropas de la Guardia Nacional y agentes de inmigración a Chicago ha puesto a muchos residentes latinos en alerta: dudan si celebrar abiertamente el próximo Día de la Independencia de México.
No obstante, este sábado la multitud en el desfile anual número 24 en Pilsen fue notablemente más escasa y más moderada que en años anteriores, los cientos de personas que acudieron dijeron que estaban emocionados de celebrar su cultura a pesar de las amenazas de la Casa Blanca, reportó el Chicago Tribune.
El presidente amplió este sábado sus promesas de enviar tropas de la Guardia Nacional y agentes de inmigración a Chicago al publicar una imagen parodia de Apocalypse Now.
En la intersección de la calle 18 y la avenida South Blue Island, Sam Herrera, de 28 años, esperaba con su familia el inicio del desfile, reportó el medio Chicago Tribune.
“Lo celebramos… y nos aseguramos de saber que estamos bien. Si algo sale mal, aquí estamos, con nuestros teléfonos listos para grabar y asegurarnos de que todo esté dentro de la ley”, dijo Herrera. “Eso es lo más importante”.
Otros en el área de Chicago pasaron el día protestando contra cualquier acción inminente. En el centro, cientos de personas escucharon discursos que criticaban a los agentes federales y portaban carteles que decían “ICE fuera de Chicago” y “Sin tropas en nuestras calles”.
Los organizadores del desfile del sábado en Pilsen reafirmaron su decisión de continuar, afirmando que no se les impediría celebrar “nuestra herencia, nuestra cultura” a pesar del temor a la deportación.
El desfile de La Villita se llevará a cabo según lo previsto, informaron organizadores.
El presidente del Consejo Comunitario de La Villita, Baltazar Enríquez, estuvo en el desfile repartiendo silbatos para que la gente pudiera soplar si llegaban agentes de ICE.
bmc