Minneapolis, Minnesota.— Para muchos propietarios, reemplazar el revestimiento de su casa es una tarea tediosa y rutinaria.
Pero pregúntele a George Johnson y él estará en desacuerdo con usted.
“Fue un shock, sí, completamente”, dijo Johnson, de pie junto a su casa en el sur de Minneapolis.
“Cuando empezaron a hacer esto, no tenía ni idea de que habría algo así aquí, y fue una completa sorpresa”, añadió.
Cuando los contratistas estaban reemplazando el revestimiento de su casa, descubrieron un anuncio enorme de harina Gold Medal.
“Es un lugar emblemático de Minnesota que se reconoce al instante”, dijo. “Es un acontecimiento realmente genial”.
Johnson se consideró afortunado nuevamente cuando el mismo anuncio apareció también al otro lado de su casa.
“No ha visto la luz del sol hasta hoy”, dijo, de pie junto a la enorme pintura en el costado de su casa.
“Básicamente, quedó sellado, ya sabes, hace 110 años bajo papel alquitranado y revestimiento”, añadió.
Los registros muestran que en noviembre de 1915, la casa, que en ese momento figuraba como tienda, se trasladó un lote más allá, a donde se encuentra actualmente en Minnehaha Avenue.
“Mi reacción fue: esto es lo más genial que existe”, dijo Tanner Deeds, especialista del programa en el Museo Mill City.
Deeds dice que el eslogan que aparece en los anuncios –”Con el tiempo, ¿por qué no ahora?”– surgió a principios del siglo XX.
“Esta es una de las primeras campañas publicitarias de alimentos que se mantiene en la historia de Estados Unidos”, dijo.
Ese eslogan generó competencia, dice Deeds, y Pillsbury finalmente surgió al otro lado del río. Asegura que la molienda de harina alcanzó su máximo auge hacia el comienzo de la Primera Guerra Mundial.
“Realmente nos puso en el mapa”, dijo. “Es un claro ejemplo del papel que Minnesota desempeñaba en la economía global en ese momento”.
Johnson dice que planea preservar los anuncios exponiendo la parte que no recibe la luz solar directa. Explica que el plan es retirar toda la fachada, sellar la casa, reinstalar el letrero y luego aplicar sellador para protegerlo.
“La gente siempre piensa que encontrará algo increíble en el ático o en esta vieja casa”, dijo Johnson. “Y nunca piensas que la casa en sí es lo realmente genial e histórico”.