Artículo originalmente publicado por Michelle Griffith para Minnesota Reformer. Fotografía: Nicole Neri/Minnesota Reformer
Una influyente funcionaria demócrata, campesina y laborista del norte de Minnesota ha generado controversia en el partido al negarse a renunciar como presidenta del Distrito Congresional 8, a pesar de haber sido acusada de homicidio vehicular.
El incidente ha dividido a los demócratas entre quienes creen que se debe garantizar el debido proceso a los acusados y quienes creen que un escándalo personal descarrilará los objetivos de los asediados demócratas del norte de Minnesota.
La noche del 3 de julio de 2024, la policía del condado de Itasca respondió a un reporte de una persona tendida en un carril de la autopista 169, cerca de Nashwauk. Encontraron el cuerpo de Carter Haithcock, de 19 años, quien fue declarado muerto en el lugar.
A la mañana siguiente, la presidenta del DFL del Distrito 8, Cyndy Martin, llamó al 911 y dijo que podría haber estado involucrada en un choque cerca de Nashwauk la noche anterior, según la denuncia penal.
Martin, quien rechazó la solicitud de comentarios del Reformer, se declaró inocente el mes pasado de un delito grave de homicidio vehicular. Martin enfrenta hasta 10 años de prisión. Su abogado, David Valentini, también declinó hacer comentarios.
Martin es una de las figuras más influyentes del DFL en el norte de Minnesota. Además de presidir el partido del 8.º Distrito, forma parte del Comité de Constitución, Estatutos y Reglamento del DFL. También es una exitosa recaudadora de fondos y tiene contactos con funcionarios electos estatales.
Los demócratas de Minnesota se han abstenido en gran medida de comentar públicamente sobre el caso de Martin y sobre si debería permanecer en el liderazgo del partido. Los partidos de distrito congresuales locales no están controlados por el partido estatal, pero los funcionarios estatales podrían pedir o presionar a Martin para que renuncie.
Varios funcionarios electos del DFL en el norte no respondieron o rechazaron las solicitudes de comentarios del Reformer sobre Martin.
El mes pasado, en una sesión de escucha demócrata, se le preguntó al presidente del DFL, Richard Carlbom, por qué alguien acusado de homicidio vehicular debería permanecer en el liderazgo del partido.
Carlbom, tras una pausa incómoda, dijo: “En este país existe el debido proceso, y no voy a… no sé, a veces la gente piensa que puedo simplemente… bueno, voy a permitir que se cumpla el debido proceso”.
Carlbom se hizo eco de esos comentarios en una declaración al Reformer.
“Esta fue una trágica pérdida de vidas, y mis condolencias a la familia de Carter y a todos los afectados por esta desgarradora situación. Dado que se trata de un caso legal en curso, no vamos a prejuzgar el proceso judicial”, dijo Carlbom.
Pero la presión para que Martin renuncie podría estar aumentando. La periodista ciudadana de Minneapolis, Taylor Dahlin, sigue de cerca el caso, y algunos activistas del partido quieren su salida.
Un correo electrónico misterioso
Lee Cutler fue vicepresidente del DFL del 8.º Distrito bajo el liderazgo de Martin hasta marzo de este año. Cutler afirmó ser buen amigo de Martin, pero consideró que ella debería haber renunciado en noviembre de 2024, cuando fue acusada penalmente.
Afirma que, poco después de que la fiscalía acusara a Martin, él y Martin redactaron juntos un correo electrónico a los delegados del 8.º Distrito del DFL, informando que Martin ya había renunciado. El correo electrónico se envió desde la cuenta de correo electrónico del partido local.
“Desafortunadamente, nuestra amiga y líder Cyndy Martin ha renunciado a la presidencia debido a asuntos personales”, escribió Cutler en el correo electrónico enviado el 23 de noviembre de 2024.
En el correo electrónico, Cutler instó a los delegados a informar a la prensa, si se les contactaba, que Martin ya no era la presidenta y que él era el presidente interino.
Unas tres horas después, otro correo electrónico de la cuenta local del partido DFL, supuestamente escrito por Cutler, decía a los delegados: “No importa”. “Por favor, ignoren el correo electrónico anterior que envié recientemente. Hubo un malentendido, y Cyndy Martin no ha renunciado a su cargo como presidenta del CD 8”, decía el correo electrónico.
Cutler afirma no haber escrito el segundo correo electrónico, a pesar de que su nombre figura en la firma del mensaje. Afirma que el segundo correo llegó a la dirección del DFL y sospecha que alguien del partido lo envió bajo su nombre.
Los detalles de los correos electrónicos fueron reportados inicialmente por el Duluth Monitor.
En marzo, la política de Northland quedó bajo la lupa después de que el exsenador de Minnesota Justin Eichorn fuera acusado de intento de coerción y seducción de un menor. Poco después de su arresto, Eichorn renunció al Senado bajo la enorme presión de sus colegas republicanos.
Cutler afirmó que la acusación contra Martin y el escándalo de Eichorn son obviamente diferentes, pero añadió que, al igual que con Eichorn, la acusación contra Martin es una distracción.
Es trágico lo que sucedió. Siempre he creído que, como líder del DFL, nuestro papel era impulsar al partido, sus objetivos y a los candidatos, no a nosotros mismos —dijo Cutler—. Se supone que los líderes del partido deben apoyar ese trabajo entre bastidores, así que la noticia nunca debería ser sobre nosotros. En el 8.º Distrito, debemos centrarnos en elegir a un candidato que represente los valores de nuestro partido, y esta situación solo sirve para distraernos de esa labor. Las peleas dentro del partido nunca son buenas.
Minnesota contra Martin
Martin declaró a las autoridades en julio de 2024 que, la noche del accidente, asistió a una cena y se dirigía a casa después de terminar la cena alrededor de las 10:30 p. m., según documentos judiciales. Mientras conducía por Nashwauk, en el condado de Itasca, chocó contra algo con su auto, según declaró a los oficiales.
“Creía haber atropellado a un búho o un pavo. (Martin) declaró que no se detuvo y continuó hacia su casa”, se lee en la denuncia.
Martin estaba hablando por teléfono con alguien en el momento en que presuntamente atropelló a Haithcock, según la denuncia. La policía entrevistó a la persona que llamó, quien dijo que Martin exclamó: “¡Dios mío! ¡Golpeé algo!”, según la denuncia. La persona que llamó le dijo a Martin que llamara al 911. Martin luego le devolvió la llamada y le dijo que no había ningún problema con su vehículo, que solo algo golpeó su parabrisas.
Foto del auto de Martin tomada por agentes de la Patrulla Estatal en su casa de Grand Rapids el 4 de julio de 2024. Captura de pantalla de documentos judiciales.
Agentes de la patrulla estatal entrevistaron a Martin en su domicilio de Grand Rapids la mañana del accidente. Afuera encontraron su GMC Yukon color verde azulado; el parabrisas estaba agrietado, un faro roto y un trozo de tela negra atascado entre el capó y el chasis, según documentos judiciales.
Los agentes le preguntaron a Martin si bebía o tomaba medicamentos, y Martin les dijo que tenía una receta de opioides para el dolor de rodilla y que había tomado una pastilla ese mismo día. Durante la entrevista, los agentes afirmaron que Martin presentaba cambios de humor y que estaba “angustiada, llorando y alterada a veces”, según documentos judiciales. Debido a su comportamiento, los agentes decidieron realizar una investigación por conducir bajo los efectos del alcohol (DWI). Martin dio negativo en las pruebas de sustancias controladas, incluyendo opiáceos.
El estado y la defensa de Martin coinciden en que Haithcock vestía ropa oscura y “tuvo una conducta arriesgada” al caminar por la carretera, según escribió el estado en documentos judiciales.
Aunque el accidente ocurrió en julio de 2024, Martin no fue acusada de homicidio vehicular hasta cuatro meses después. El fiscal del condado de Itasca, Jacob Fauchald, se negó a explicarle al Reformer el motivo.
Según la ley estatal, “el conductor de cualquier vehículo motorizado involucrado en una colisión debe detener el vehículo inmediatamente en el lugar de la colisión, o lo más cerca posible, e investigar razonablemente el impacto”.
La fiscalía argumenta que Martin proporcionó información contradictoria sobre lo sucedido. Declaró a los agentes que creía haber atropellado a un pájaro y no se detuvo, mientras que las imágenes de vigilancia de una gasolinera cercana la muestran deteniéndose allí durante unos 25 segundos.
El estado argumenta que un jurado podría determinar que Martin no realizó una investigación razonable después de la colisión y dudar de su afirmación de creer que atropelló a un animal.
“Existe una marcada diferencia entre un hombre adulto y un búho o un pavo”, escribió el estado en documentos judiciales.
La defensa de Martin se basa en si realizó una investigación adecuada de la colisión, ya que creía que solo había atropellado a un pájaro.
Haithcock tenía 19 años al momento de su muerte y un hijo pequeño.
Su pasión era ayudar a quienes atravesaban momentos difíciles. Era cariñoso, genuino y un chico muy dulce y divertido que cuidaba de todos. Carter tenía un gran sentido del humor y podía hacer reír a cualquiera, siempre estaba “relajándose”, dice su obituario.
Minnesota Reformer es parte de States Newsroom, la organización de noticias sin fines de lucro más grande del país, centrada en los estados.
